El Conejito Saltarín

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Había una vez en un tranquilo bosque verde, un pequeño conejito llamado Saltarín. Era tan enérgico que sus saltitos parecían pequeños bailes bajo el sol.
Saltarín amaba explorar cada rincón del bosque, desde los altos robles hasta el arroyo cristalino que murmuraba canciones de agua.

Una tarde, mientras el sol empezaba a esconderse detrás de las montañas, Saltarín encontró un campo lleno de dientes de león. Maravillado por las suaves y blancas florecitas, decidió que quería llevar algunas a su mamá. Saltaba feliz de uno a otro, recogiendo los más bonitos.

Mientras jugaba, se dio cuenta de que el sol casi había desaparecido y una suave oscuridad comenzaba a envolver el bosque. Saltarín, un poco preocupado, miró a su alrededor. No reconoció donde estaba; se había alejado demasiado en su emoción.

Recordó entonces lo que su mamá siempre le decía: "Si alguna vez te pierdes, busca las estrellas y sigue la que brilla más hacia el este, ella te guiará a casa". Saltarín miró hacia el cielo y allí estaba, una estrella brillante que parecía sonreírle.

Confiado, comenzó a seguir la estrella, sus pequeños saltos se convirtieron en una danza de esperanza y alegría. No pasó mucho tiempo antes de que viera las luces de su hogar a lo lejos. Corrió lo más rápido que pudo y, al llegar, su mamá lo esperaba con una sonrisa y un abrazo caluroso.

"Mamá, me perdí, pero la estrella me ayudó a volver", dijo Saltarín mientras le entregaba las flores que había recogido.

"Mi valiente conejito", respondió su mamá, "siempre encuentra su camino de regreso". Esa noche, mientras Saltarín se acurrucaba en su cama, sintió cómo el suave brillo de la estrella lo vigilaba desde la ventana, asegurándose de que sus sueños fueran tan dulces como sus aventuras.

Y así, con el corazón lleno de amor y los ojos cerrados bajo el suave parpadeo de las estrellas, el pequeño conejito Saltarín se durmió, soñando con nuevos saltos y danzas en su querido bosque.

Fin.

Reflexión

"En la oscuridad del bosque, Saltarín nos enseña que incluso cuando nos perdemos, siempre hay una luz que guía el camino de regreso a casa, recordándonos la importancia de la guía familiar."

Esperamos que te haya gustado El Conejito Saltarín. Última revisión en 2024

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