La Estrella Curiosa
En lo alto del cielo nocturno, donde las estrellas brillan con luz propia, vivía una pequeña estrella llamada Estelar. A diferencia de sus compañeras, que se contentaban con titilar desde lejos, Estelar era curiosa y siempre soñaba con visitar el mundo que observaba cada noche.
Una tarde, la Luna, amiga y confidente de Estelar, le contó una historia sobre un hermoso lago en la Tierra que reflejaba las estrellas en su superficie tranquila. Fascinada por la idea de verse reflejada en aguas terrestres, Estelar deseó con todas sus fuerzas visitar ese lago.
Con un poco de magia lunar y un deseo muy fuerte, Estelar consiguió descender del cielo en forma de una pequeña y brillante luciérnaga. Al llegar a la Tierra, se encontró en un frondoso bosque que la llevó directamente al lago de la historia de la Luna.
Cuando Estelar llegó a la orilla, no pudo creer lo que veían sus ojos. El lago era como un gran espejo que reflejaba el cielo nocturno. Por primera vez, Estelar se vio a sí misma desde otra perspectiva y se sintió parte de algo mucho más grande.
Mientras exploraba el borde del agua, una rana se acercó y le preguntó: "¿Quién eres y de dónde vienes, pequeña criatura brillante?" Estelar, emocionada, le contó sobre el cielo estrellado y su viaje desde las alturas. La rana, impresionada, le mostró cómo cantar con el eco del lago.
Estelar aprendió esa noche que cada criatura, grande o pequeña, tiene su lugar especial en el mundo. Decidió que cada noche, al volver al cielo, compartiría las historias de la Tierra con las otras estrellas.
Finalmente, cuando el amanecer comenzó a teñir de rosa el cielo, Estelar, con el corazón lleno de nuevas historias y aventuras, ascendió de nuevo al cielo, dejando atrás el reflejo del lago, pero llevándose consigo el eco de la rana y la belleza del mundo que había explorado.
Y desde entonces, cada vez que una estrella parece parpadear un poco más brillante, podría ser Estelar, la estrella curiosa, emocionada por contar otra historia del mundo hermoso que una vez visitó.
Fin.
Reflexión
"Que la curiosidad de cada niño ilumine su camino, llevándolos a descubrir y aprender de la maravilla de cada nuevo día, como lo hizo la pequeña Estelar."
Esperamos que te haya gustado La Estrella Curiosa. Última revisión en 2024
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